Hemos creado la guía completa sobre sujetadores para que lo sepas todo sobre esta prenda de lencería tan importante. Pero aquí abordamos un tema amplio y bonito: la lencería de novia.
Cada momento de la vida merece un sujetador adecuado. Una boda significa buscar el vestido perfecto… ¡pero también la lencería que lo acompañará! Según el estilo y el color que elijas para tu look, selecciona una lencería que no arruine la celebración y que te haga sentir bien. Aquí tienes todo lo que necesitas saber para elegir tu lencería de boda según tu vestido y tus deseos.
¿Qué criterios tener en cuenta para elegir el sujetador de boda?
Un buen sujetador de boda debe ser imperceptible y ofrecer una sujeción impecable. Bajo un vestido blanco o marfil, apuesta por materiales lisos e invisibles para evitar marcas no deseadas. Llevar un sujetador con buena sujeción es clave: incluso para vestidos palabra de honor o con espalda descubierta, existen modelos pensados para bustos generosos que no sacrifican la comodidad, siempre que elijas la talla adecuada. Por último, el color también importa: blanco puro, marfil o nude, elige según la transparencia y el tejido de tu vestido.
¿Qué forma de sujetador según el estilo del vestido?
Cada vestido tiene su carácter, y cada lencería de boda su papel. Aquí algunas ideas para encontrar la combinación perfecta:
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Vestido palabra de honor o con hombros descubiertos
Elige un sujetador tipo bandeau o sin tirantes, con buena estructura para evitar que se deslice.
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Vestido con espalda descubierta
El protagonista es el sujetador de espalda baja o adhesivo: discreto pero con la sujeción necesaria.
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Vestido ajustado o entallado
Apuesta por un sujetador invisible, sin costuras (preformado) y de microfibra. El efecto segunda piel será tu mejor aliado.
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Vestido con escote profundo
Un modelo escotado o triangular será ideal para realzar el busto sin robar protagonismo al vestido.
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Vestido fluido o ligeramente transparente
La lencería nude o marfil es la mejor opción. Se camufla mejor bajo tejidos delicados que el blanco brillante.
Consejos prácticos para el gran día
Para evitar sorpresas y estrés innecesario, ¡anticipa!
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Prueba, camina, muévete: prueba tu vestido con la lencería, da unos pasos, levanta los brazos, siéntate… Asegúrate de que todo se mantiene en su sitio y te sientes cómoda.
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¿Cambio de look por la noche? Lleva una segunda opción. Y si te apetece, añade a tu maleta un conjunto más atrevido. Encaje negro, satén suave, transparencias… ¡las novias también tienen derecho a su momento sexy!
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No solo el sujetador importa: braga invisible, culotte moldeador o tanga discreto… adapta la parte inferior según el vestido y el efecto deseado.
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Lleva el conjunto al menos una vez antes del gran día para detectar posibles molestias y evitar incomodidades.
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No olvides los accesorios: ¡el liguero con medias sigue siendo tendencia!
